El desarrollo automotriz ha dejado atrás su pasado centrado en el hardware. Hoy es el software el que define las características más diferenciadoras de los vehículos, como la asistencia al conductor, el infoentretenimiento, la conectividad y la conducción automatizada. Al igual que muchos proveedores diferentes aportan componentes físicos a un solo vehículo, harán falta muchos socios y proveedores para crear el complejo software necesario para hacer funcionar los vehículos del futuro.
Las normas comunes desempeñarán un papel importante en la consecución de ese nivel de colaboración. Cuando se aplican correctamente, las normas permiten a diferentes equipos y empresas integrar más fácilmente el software en la base de código general y realizar pruebas automatizadas. Las normas aceleran el desarrollo, reducen los errores y permiten actualizaciones puntuales antes y después del inicio de la producción.
Muchos fabricantes de equipos originales reconocen ahora el valor de la normalización para la interoperabilidad del software, la integración continua, el desarrollo acelerado y la calidad del código. Sin embargo, la industria tiene obstáculos que superar para aprovechar plenamente sus ventajas.
La estandarización se está produciendo a varios niveles, incluidas las API, los componentes de software, los marcos generales y las prácticas de desarrollo de software. Para profundizar en cada una de estas áreas, lea nuestro documento técnico.
